miércoles, 15 de abril de 2009

Ya no pierden a una oveja descarriada... ahora la cosa va por rebaños

La noticia que publique ayer, procedente de el periódico El Pais, ha tenido eco en todos los medios de comunicación a nivel nacional. Ha quedado presente algo que ya se sabía desde hace años, yo diría que incluso siglos: hay una brecha tremenda entre los denominados católicos de base (la gente de a pie, y curas de barrio, básicamente) y la jerarquía de la Iglesia.
Lo realmente soprendente es que esto sea noticia. La jerarquía eclesiastíca está viviendo en su propio mundo, creado a su medida (el Vaticano), mientras que los curas, y los creyentes viven en el mundo real. Un mundo donde las mentiras y comentarios soezes de la iglesia no llevan a nada a nivel practico; ni tan siquiera llevan a nada a nivel moral.
La política de la iglesia me está recordando a cierta consultora informática, que recientemente cambió su nombre en un intento fallido de lavado de imagen, y propagandístico. Dicha empresa contrata a recien licenciados en informática pagándoles un sueldo mísero (ahora están en torno a los 700 Euros al mes) obligandoles a quedarse, al menos, 14 horas diarias en su puesto de trabajo. Es de estas empresas en las que tienes que pedir permiso para poder salir a tu hora, y te miran con recelo si lo haces. Dicha empresa tiene una rotación del 30% anual de su plantilla, es decir, que se va un 30% de su plantilla al año, teniendo que contratar a gente nueva. Cuando presentas tu dimisión te preguntan porque te vas. Tu respuesta es clara: muchas horas, poco sueldo, y mucha presión. Entonces es cuando te quedas flipando porque te dicen, son ponerse ni coloraos: no, te vas porque no te comprometes con la empresa, ni te comprometes con los compañeros.
A la Iglesia Católica le pasa lo mismo. Saben porque motivo las iglesias están vacías, pero no quieren reconocerlo. Prefieren pensar que esta vida moderna nos ha dejado sin valores, y que la culpa es de los ateos de nuestros gobernantes. Cualquier cosa antes de reconocer la verdad. Y la verdad es que ni escuchan ni pretenden escuchar a sus fieles. Ellos imponen las normas, y buscan la excusa para explicar la perdida de fieles. Ponen una paja en el ojo ajeno, para no tener que mirar la viga en el propio, que ver la ven. Prefieren autoengañarse, y pensar que la culpa es de otro. La culpa siempre tiene que ser de otro.
Esto ayer a desembocado, no en ruptura, pero si en una separación clara entre los fieles y la jerarquía eclesiastica.
No estoy diciendo que la iglesia deba abandonar sus ideas principales. Pero al menos debería reconocer sus mentiras, y aceptar la realidad. Pero eso no ocurrirá nunca.
Señores, sigan haciendo el ridículo.

1 comentario:

  1. Y no solo eso Jose, si no que también evolucionamos a nuevas formas de entendimiento que poco a poco, van rompiendo los tabúes que la Iglesia Católica, predispone como valores morales.
    Antes la Iglesia campaba a sus anchas por el miedo que estos ejercían con el castigo divino, y que se arraigó con la cultura de la fe.
    Ya no son personas de bajo nivel cultural los que siguen estos preceptos, como única forma de premio por su pesar en vida... si no que se ha conformado, como una amalgama de "ideales morales" que saben muy bien manejar los de arriba, utilizando como bastión, la fe ciega que han de tener en ellos. No en vano son los "representantes de dios en la tierra"...
    Todo empezó quizás con una buena forma de vivir y sentir que fue muy bien aprovechado por un grupo de personas que hicieron de esta buena voluntad, su forma de control y buena vida.

    ResponderEliminar